Entre el 11 y el 14 de junio de 2019 se desarrolló la IX Ronda de Negociaciones entre el MERCOSUR y la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA, por su sigla en inglés) en Ginebra, Suiza. Victorio Carpintieri, subsecretario del MERCOSUR y Negociaciones Económicas Internacionales de la Cancillería Argentina, encabezó la delegación del MERCOSUR (nuestro país coordina la posición del bloque en esta negociación), mientras que Jan Farberg, director general del Ministerio de Comercio, Industria y Pesca de Noruega, presidió la delegación de la contraparte.
En esta fase avanzada de la negociación, con más de la mitad de los capítulos del acuerdo ya consensuados, los esfuerzos de ambas partes están enfocados en la tarea de revisión pormenorizada del balance global de intereses respectivos en disciplinas y en el acceso real y recíproco al mercado de bienes, servicios, inversiones y compras gubernamentales, para potenciar el aprovechamiento del tratado por parte de los operadores económicos de los dos lados.
En este sentido, y dando continuidad a los trabajos en materia de acceso a mercado, ambos bloques enfatizaron los intereses fundamentales de su respectiva pauta exportadora, concentrándose la discusión en las mejoras de sus ofertas de acceso a mercado en bienes. Asimismo, se concluyó la negociación a nivel técnico del capítulo de Compras Gubernamentales y se consensuó el Anexo sobre Servicios de Telecomunicaciones. En función de estos avances nodales, los Estados Parte del MERCOSUR comparten la convicción de que el proceso negociador se encuentra próximo ya a una etapa de cierre.
Los cuatro países que integran la zona de libre comercio de la EFTA (Islandia, Noruega, Suiza y Liechtenstein) son economías desarrolladas y muy competitivas a nivel mundial, en las cuales nuestras exportaciones ingresarán con preferencias inmediatas a partir de la entrada en vigor del acuerdo. Son, además, países con perfil emisor de inversión externa directa, y este acuerdo de libre comercio constituirá un estímulo adicional para la atracción de capitales de ese origen hacia la Argentina y el MERCOSUR.
Tanto la Argentina como el MERCOSUR han mantenido superávits comerciales con el bloque de la EFTA en años recientes, y se espera que este tratado permita incrementar y diversificar significativamente el intercambio de bienes, servicios e inversiones con todos los miembros de la Asociación Europea de Libre Comercio. El grueso de las exportaciones e importaciones de nuestro país en su intercambio con ese bloque son manufacturas de origen industrial.