Información para la Prensa Nro 293/2001
La
delegación argentina estará presidida por el vicecanciller
Chighizola
e insistirá con la necesidad de eliminar las barreras al comercio
agrícola
La Argentina participará
de la reunión de la OMC
Buenos Aires, 9 de Nov.- Una delegación
argentina presidida por el vicecanciller Horacio Chighizola participará,
entre el 9 y el 13 de noviembre en la ciudad de Doha, Qatar, de la IV
Conferencia Ministerial de la Organización Mundial del Comercio
(OMC), en búsqueda de una reducción sustancial de las
barreras comerciales, especialmente aquellas que afectan a los productos
de origen agropecuario.
La Cancillería argentina ratificará ante el organismo
multilateral su posición, basada en que los esquemas de ayuda
que benefician a los productores de los países desarrollados
significan una traba estructural que condiciona las negociaciones internacionales.
La reforma de las políticas agrícolas de aquellos países
y la liberalización del comercio internacional resultan cruciales
para asegurar una mejora sostenida en el bienestar de la población
mundial.
La OMC es el organismo multilateral que se ocupa de las normas que rigen
el comercio internacional, ejerce la administración de los acuerdos
negociados, supervisa la consistencia entre las políticas comerciales
nacionales y las normas de la organización, resuelve las diferencias
y constituye un foro para las negociaciones internacionales, entre otras
funciones.
En esta Conferencia se planteará el lanzamiento de una nueva
ronda de negociaciones comerciales, cuya agenda incluya taxativamente
el tratamiento de las distorsiones originadas en los países desarrollados
que interfieren en los mercados de productos de origen agropecuario.
Ya en la reunión ministerial del Grupo de Cairns, realizada en
Punta del Este en septiembre último, se definió una línea
de acción conjunta para combatir el proteccionismo que distorsiona
los mercados agrícolas al perjudicar a los países exportadores
más eficientes. Dicho Grupo, conformado por naciones exportadoras
de productos agrícolas, está integrado por países
como la Argentina, Australia, Brasil, Canadá, Chile, Nueva Zelanda
y Uruguay.
Los ministros del Grupo de Cairns acordaron que en la Conferencia de
Doha debía establecerse un claro compromiso para acabar con la
discriminación contra la agricultura e integrarla totalmente
en las reglas de la OMC. Los objetivos fundamentales son mejorar el
acceso a los mercados y eliminar los mecanismos que distorsionan la
producción y el comercio de productos de origen agropecuario,
tales como barreras a las importaciones y subsidios tanto a la producción
como a las exportaciones.
En ese sentido, los países que revelan mayor tendencia al proteccionismo
de sus propias producciones agropecuarias son los miembros de la Unión
Europea (UE), Estados Unidos y Japón, entre otros. La UE aplica
desde hace cuatro décadas una política agrícola
común, a través de instrumentos tales como precios sostén,
pagos a sus productores y subsidios a las exportaciones, lo que provoca
un incremento artificial de sus ingresos. En cuanto a las importaciones,
el bloque levanta barreras arancelarias con alícuotas variables
e introduce trabas para-arancelarias como cupos o contingentes. El Consejo
Europeo, por medio de la "Agenda 2000", estableció
que los gastos en política agrícola promediarían
40.500 millones de euros entre 2000 y 2006. De ese total, el 70 por
ciento corresponde a ayudas directas a productores, y el 30 por ciento
a la intervención en mercados (vía compras).
Si se desea un comercio internacional justo y equitativo, basado en
la competitividad, tal como proclaman los países industrializados,
no es razonable que exista un tratamiento diferenciado para sectores
como el agrícola, y menos aún cuando ello es en beneficio
de los países desarrollados y en detrimento de las economías
emergentes, cuyas exportaciones se basan en productos primarios. Es
por ese motivo que nuestro país apoyará el lanzamiento
de una nueva ronda de negociaciones siempre y cuando tenga por objetivo
una reforma sustancial de las políticas agrícolas proteccionistas.