El secretario de Relaciones Económicas Internacionales, Martín
Redrado, encabeza la delegación argentina que participa de la
Decimocuarta Reunión del Comité de Negociaciones Comerciales
(CNC) del ALCA, que se desarrolla en San Salvador hasta el viernes próximo.
La Reunión tiene por objeto evaluar el estado general
de las negociaciones del ALCA y los avances logrados por los distintos
Grupos de Negociación y Comités en estos seis meses de
negociaciones. Como es habitual, los funcionarios deberán resolver,
además, aquellos temas pendientes que no han logrado consenso
en estas entidades y que las mismas entienden necesarias para continuar
el trabajo técnico.
La República Argentina, conforme su posición
tradicional, participará de la reunión como parte del
bloque MERCOSUR, con una posición única y coordinada con
el resto de sus socios.
“La Argentina busca garantizar el acceso de sus
productos a todos los Mercados del hemisferio. Para llegar a este objetivo,
junto con los países del MERCOSUR, traemos una propuesta práctica
y realista que logre cumplir con los tiempos preestablecidos”,
señaló Redrado..
En términos generales, y teniendo en cuenta las
discusiones preliminares que algunos Ministros han llevado a cabo recientemente
en la Reunión informal de Maryland (12 y 13 de junio pasado),
el Comité de Negociaciones Comerciales deberá analizar
el alcance de la negociación ALCA, de manera de conformar una
agenda de negociaciones realista que permita concluir el proceso ALCA
el 1 de enero de 2005. Para ello, está prevista una reunión
informal que profundizaría la discusión sobre los lineamientos
esbozados en la Reunión Ministerial.
Los funcionarios deberán evaluar la agenda de negociaciones
del ALCA y determinar si el Acuerdo final mantendrá el objetivo
general existente actualmente o si se dividirán los temas bajo
tratamiento en el ALCA, derivando algunos de los elementos de discusión
al marco multilateral – Organización Mundial del Comercio
(OMC) – y dejando otros temas para discusión bilateral
(MERCOSUR + otro país o bloque), aún cuando este último
ejercicio pueda tener lugar bajo el formato ALCA.
Hasta el momento, se ha propuesto la negociación
de un Acuerdo marco – “baseline–agreement” –
que concentre la definición de algunos temas en el Hemisferio
y derive otros temas de negociación – principalmente, propiedad
intelectual y defensa comercial (derechos antidumping y compensatorios)
– a la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Este enfoque “moderado” permitiría
evitar que los países de la región se vean obligados a
adoptar estándares regionales de protección de la propiedad
intelectual superiores a los previstos en el marco multilateral. En
materia de defensa comercial, el Hemisferio acordaría mecanismos
de consulta permanentes sobre la aplicación de derechos antidumping
y compensatorios que tuvieran como destinatarios las exportaciones regionales.
Argentina propicia, asimismo, una aceleración de
las negociaciones de acceso a mercados de bienes agrícolas e
industriales, servicios e inversiones con los otros países y
bloques de la región, en un formato 4 + 1, las que se llevarían
a cabo en el marco del ALCA. La propuesta parte del reconocimiento de
las diferencias que, de hecho, presentan los distintos países
en su relacionamiento comercial y busca acordar compromisos efectivos
de acceso de los productos de MERCOSUR a los mercados del Hemisferio.
En materia de agricultura, las negociaciones de acceso
a mercados y el compromiso de eliminación de subsidios a las
exportaciones agrícolas se mantendrían en el ALCA, en
tanto se derivaría a la OMC la discusión sobre eliminación
y / o reducción de las medidas de apoyo interno y otros programas
de ayuda distorsivos del comercio de productos agropecuarios, objetivo
en el que MERCOSUR y Estados Unidos trabajarían en forma conjunta.
Argentina propuso, sin embargo, que el Hemisferio acuerde mecanismos
compensatorios que permitan minimizar dichos efectos distorsivos en
la región, hasta el desmantelamiento total de estas medidas.
En lo que se refiere a compras gubernamentales, los países
acordarían en el Hemisferio una limitación de la negociación
a los temas de transparencia, pero no asumirían compromisos en
materia de acceso a los mercados.
Por su parte, en materia de Servicios e Inversiones, este
enfoque realista se traduciría en una limitación de la
negociación a sectores considerados clave por los países
del ALCA, los que se definirían por consenso, basado en un enfoque
de lista positiva. Con relación a estos sectores, los países
asumirían compromisos nacionales, limitados mediante un enfoque
de lista negativa, lo que permitiría excluir determinados subsectores
y / o prestaciones de la cobertura general.
Esta opción por un “baseline agreement”
se complementaría con el compromiso de profundización
posterior del Acuerdo ALCA, profundización que se derivaría
de Acuerdos bilaterales entre los países de la región.
Este enfoque realista, que tiene como objetivo central
reforzar la necesidad de alcanzar un Acuerdo hemisférico equilibrado,
que pueda satisfacer a los distintos actores del proceso ALCA, permitiría
concentrar los esfuerzos negociadores en los temas centrales de la negociación
y lograr resultados concretos para enero de 2005.
8 de julio de 2003