Los días 9 y 10 de junio, el Secretario de Comercio y Relaciones Económicas Internacionales, Embajador Alfredo Chiaradía, se reunió en Buenos Aires con el Secretario de Comercio de la India, Sr. Gopal Pillai. Estos encuentros tuvieron como objetivo repasar la agenda y analizar el estado de situación actual de la Ronda de Doha de negociaciones comerciales multilaterales.
Ambos Secretarios coincidieron en la importancia de concluir las negociaciones multilaterales en el menor plazo posible, de conformidad con el Mandato de Doha para el Desarrollo, y de expandir el comercio, particularmente en bienes y servicios de especial interés para los países en desarrollo. Una pronta resolución de la Ronda de Doha para el Desarrollo reforzaría el sistema multilateral de comercio.
A fin de alcanzar este objetivo, destacaron la necesidad de corregir los desequilibrios actuales que se observan en el texto de la negociación, particularmente en las áreas clave de Agricultura y Bienes Industriales (NAMA, por sus siglas en inglés). Al respecto, ambas partes subrayaron el papel central desempeñado por los grupos de países en desarrollo, G - 20 y NAMA 11, de los que tanto la India como la Argentina son miembros.
En lo que se refiere a Agricultura, ambos Secretarios coincidieron en la necesidad de alcanzar una reducción sustantiva de las subvenciones totales, que permita eliminar la posibilidad de que los miembros desarrollados, especialmente los Estados Unidos y la Unión Europea, incrementen los niveles de subvención aplicados actualmente. Al mismo tiempo, se debería garantizar la neutralidad presupuestaria de los pagos de caja verde y que no se transfieran subvenciones distorsivas a la caja verde. En lo que concierne a acceso a los mercados, ambas partes coincidieron en que el corte arancelario lineal promedio mínimo del 54% propuesto para los países desarrollados en el texto del Presidente debería respetarse, al igual que el otorgamiento de una expansión significativa de las cuotas arancelarias para productos sensibles, que debería efectuarse de un modo transparente y explícito.
Con relación a los bienes no agrícolas, ambas partes señalaron que ni la India ni la Argentina estarían dispuestas a aceptar un acuerdo que no tenga en cuenta el Mandato de Doha, el “Paquete de Julio” de 2004 y la Declaración Ministerial de Hong Kong de 2005, que contienen la reciprocidad menos que plena en los compromisos de reducción para los países en desarrollo con relación a los países desarrollados. Asimismo, reiteraron que un acuerdo final debería respetar el trato especial y diferenciado para los bienes industriales de los países en desarrollo, otorgando un porcentaje adicional y adecuado de flexibilidades para los sectores industriales sensibles y vulnerables. También destacaron la importancia del cumplimiento del Párrafo 24 de la Declaración Ministerial de Hong Kong, que exhorta a alcanzar un resultado equilibrado en acceso a mercados para Agricultura y NAMA.
Ambas partes subrayaron que el actual texto borrador de NAMA no refleja este equilibrio, ya que exige que los países en desarrollo, en especial los miembros del NAMA-11, efectúen mayores cortes que los ofrecidos por los países desarrollados, lo que resulta totalmente inaceptable.
Ambas autoridades señalaron la relevancia de las discusiones actuales sobre flexibilidades ampliadas de un 14% de líneas arancelarias y de un 19% del volumen de comercio para los productos sensibles de los países en desarrollo en NAMA, y pidieron avanzar en las negociaciones para aumentar tanto el número de líneas arancelarias como el volumen de comercio a ser cubiertos por las flexibilidades. Rechazaron la vinculación que efectúa el texto del Presidente, especialmente entre las flexibilidades y los coeficientes de fórmula suiza, por ser opuesta al Mandato Ministerial.
En conclusión, los Secretarios Pillai y Chiaradía apelaron a restaurar el equilibrio en las negociaciones, respetando íntegramente el principio de reciprocidad menos que plena, el Párrafo 24 de la Declaración Ministerial de Hong Kong y el trato especial y diferenciado para los países en desarrollo. Sólo tal equilibrio haría posible que la India y la Argentina aprobaran los textos y se pudiera ingresar en la etapa final de la Ronda de Doha para el Desarrollo. Finalmente, exhortaron a los países desarrollados a demostrar la voluntad política necesaria para asegurar este equilibrio y para hacer recíproca la importante contribución que los países en desarrollo están efectuando a la Ronda y al sistema multilateral de comercio basado en la OMC.